¿Cuándo fue la última vez que te viste al espejo, y tu reflejo te despertó esa ternura que sientes por tus hijos?
O acaso quién aparece en tu mente es el Juez, que de inmediato te dice “qué ojeras tan feas” “esa lonja hay que esconderla” “te ves bien, pero…..”
Nuestro niño interior necesita tener un lugar en nuestra vida. Hoy te invitamos a:
1.- Mírate en el espejo. Observa tus pensamientos, deja a un lado aquellos que te juzgan.
2.- Ve más profundo. Ubica en tu mirada a tu niño interior. Recordar a tus hijos puede ayudarte a reconocerlo en ti. Encuéntralo! Ahí está…
3.- Conecta. ¿Qué necesita recibir de ti? ¿Qué palabras necesita escuchar? Quizá eso que no te has dicho en mucho tiempo, y que andas buscando allá afuera (en tu trabajo, con tu pareja, con la comida, etc.)
Algunas frases que podrías necesitar decirte:
– ¡Qué [email protected] eres!
– Te amo, mi niñ@
– Eres especial
– Me encanta tu chispa
– Perdóname por haberte olvidado, aquí estoy
– Lo siento por ____________
– Gracias por ser ____________
– ¡Creemos un gran día!
Así como tus hijos tienen una energía increíble, tú también la tienes. La clave está en despertar e integrar la energía de tu niño interior.
Mientras más en contacto estés con tu niñ@ interior, más fácilmente podrás identificar qué están necesitando tus hijos (y tú también). Esta es una clave fundamental para ejercer una paternidad consciente, y para aprender a educar sin lastimar.
Si te sirvió este mensaje, COMPÁRTELO. Muchos niños (olvidados allá adentro) te lo agradecerán.
Con amor,
Luis Carlos y Gaby
Luis Carlos y Gaby
El entrenamiento introductorio del Método Paternidad Efectiva ha sido tomado por más de 125 mil padres alrededor del mundo.
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